Un Sistema Seguro y humano

El concepto de Sistema Seguro emana de experiencias internacionales como la Seguridad Sostenible de los Países Bajos, formulada por primera vez en 1992, o la Visión Cero de Suecia, aprobada por el parlamento de ese país en 1997. Desde entonces, muchos países, regiones y ciudades, así como la práctica totalidad de los organismos internacionales relevantes —Naciones Unidas, Organización Mundial de la Salud, Foro Internacional del Transporte, Unión Europea—, han utilizado el Sistema Seguro como punto de partida de sus reglamentos, planes o recomendaciones. Existen evidencias de que la aplicación del Sistema Seguro ha llevado, en general, a reducciones de la siniestralidad superiores.

El aumento de las estrategias y políticas basadas en los conceptos de Sistema Seguro o Visión Cero ha dado lugar a diferentes usos e interpretaciones de esos términos. Así, para algunas personas, Visión Cero representa el objetivo a largo plazo de erradicar las muertes y lesiones graves en las vías públicas, mientras que el Sistema Seguro es la forma de alcanzar ese objetivo; para otras, la Visión Cero representa fundamentalmente un caso particular de Sistema Seguro.

Con el fin de evitar estos problemas terminológicos, la presente Estrategia parte de la propuesta de que un Sistema Seguro consta de tres componentes:

1. una visión
2. una serie de principios
3. un conjunto de herramientas para desarrollar la visión y los principios

El análisis de la visión, principios y herramientas de las distintas formulaciones existentes del Sistema Seguro muestra que, mientras existe un elevado grado de homogeneidad en cuanto a la visión y los principios utilizados por diferentes países, no ocurre lo mismo con las herramientas prácticas. Como defienden muchos expertos, cada país debe encontrar las soluciones que mejor se adapten a su situación, siempre que sean coherentes con los principios del Sistema Seguro. Se habla así de principios universales y soluciones locales.

Una de las principales prioridades de esta Estrategia es, precisamente, llegar a una formulación compartida sobre las soluciones prácticas concretas que deben utilizarse en España para integrar los principios del Sistema Seguro en la política nacional de seguridad vial.

La visión del Sistema Seguro

Las visiones existentes del Sistema Seguro adoptan, con pocas variaciones, la formulación propuesta en la primera versión de la Visión Cero definida en Suecia: “Visión Cero significa que, al final, nadie resultará muerto o herido grave dentro del sistema de transporte por carretera”.

De esta visión —como objetivo a largo plazo y como declaración ética—, se deriva una importante consecuencia: en el marco del Sistema Seguro, no tienen cabida intercambios entre movilidad y seguridad, tales como la tradicional dicotomía entre menores tiempos de desplazamiento y mayores riesgos. Se trata del principio de la seguridad primero, de acuerdo con el cual el objetivo del Sistema Seguro es maximizar la movilidad para un nivel de seguridad prefijado, no al contrario.

La visión del Sistema Seguro es la eliminación de las lesiones mortales y graves, no de los siniestros en sí. Una idea fundamental es que, si bien puede no ser posible evitar la ocurrencia de siniestros —de hecho, el Sistema Seguro admite que los siniestros seguirán ocurriendo—, sí es posible evitar que estos produzcan fallecimientos y heridas graves.